El bibliotecario de hoy es un agente innovador que se destaca por la reflexión humana, aprendizaje autónomo, la adaptación a los cambios, planificación, empatía y la creatividad.
Dentro del proceso de innovación el bibliotecario pone en evidencia habilidades y destrezas que le permiten manejar una comunicación efectiva y asertiva con los usuarios.
Los bibliotecarios son entes activos que apoyan el proceso de enseñanza y aprendizaje, el desarrollo cultural e intelectual de la sociedad.
Es una realidad que las bibliotecas como cualquier otro departamento tiene sus altas y bajas. Es aquí donde entra el rol del bibliotecario innovador como un ente activo planificador de actividades que apoyen el proyecto educativo institucional.
También el bibliotecario debe asumir el liderazgo en la formación continua y cambio educativo. En este nuevo escenario, el profesional de la información no es sólo un facilitador de fuentes de información en las bibliotecas y en los centros de recursos para el aprendizaje y la innovación.
Las bibliotecas no funcionan solas, están lideradas por una gestión con miras a la innovación, adoptando el uso de la tecnología, formación continua para ofrecer oportunidades que permitan desarrollar competencias sociocultural e intelectual.
Todo personal bibliotecario debería empoderarse de una actitud positiva considerando que la biblioteca es una estructura física pero la formación de los estudiantes, los servicios, actividades y recursos los ofrece el bibliotecario.
La autora es estudiante de la Carrera Licenciatura
en Educación mención Bibliotecología. Escuela de Bibliotecología, Tecnología e
Innovaciones Educativas. Facultad de Ciencias de la Educción, UASD.
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