Por Ivelisse Castillo Pascual
El movimiento de Open Access (Acceso Abierto) es una iniciativa global que impulsa la disponibilidad gratuita y sin restricciones de la producción científica académica a través del internet que permite a cualquier usuario leer, imprimir, distribuir descargar tomando como referencia el reconocimiento y la autoría de quien escribe todo esto ha transformado significativamente el campo de la bibliotecología y las demás ciencias a fines al promover el conocimiento para todas las personas sin importar el estatus y el acceso libre a la información científica y académica.
Otros autores como Joseph, Heather, (2013), establecen que el acceso abierto es un derecho ético que garantiza que el conocimiento financiado con fondos públicos beneficie a toda la sociedad. Según Guédon, Jean – Claude, (2001), considera que el acceso abierto no solo trata del acceso gratuito, sino de transformar el sistema de publicación académica y devolver el control a la comunidad científica.
Este modelo de publicación elimina las barreras económicas y legales que tradicionalmente han limitado la disponibilidad de recursos, facilitando el trabajo de bibliotecarios en su rol de guías entre la información y los usuarios. A su vez, ha impulsado la adopción de nuevas estrategias de gestión documental, formación en competencias informacionales, ampliando el alcance y la relevancia social de las bibliotecas en entornos académicos y comunitarios.
El Acceso Abierto en sus diversas modalidades, ha logrado derribar algunas barreras permitir el acceso libre a artículos científicos, libros, investigaciones y otras publicaciones académicas a través de repositorios institucionales y plataformas digitales, se ha logrado popularizar el acceso al conocimiento.
Relacionado
con la bibliotecología, esto implica una transformación en la forma en que las
bibliotecas organizan la información: ya no se trata de ser un punto de acceso
a recursos limitados por pagos y suscripciones, sino de ser el encargado de un
conocimiento general disponible para todos.
Las bibliotecas siempre han sido espacios que facilitan la libre información. Sin embargo, el movimiento de acceso abierto obliga a los profesionales de la bibliotecología a asumir un papel más activo como guías del acceso y la difusión del conocimiento.
Opino, que el acceso abierto ha tenido un impacto transformador en la bibliotecología, al redefinir el papel de las bibliotecas como facilitadores activos del conocimiento y no solo como pasa libros fortaleciendo la misión ética de la bibliotecología.
En conclusión, el acceso abierto no solo ha ampliado el alcance de la investigación científica, sino que también ha reafirmado la relevancia social y educativa de la bibliotecología en el siglo XXI, demostrando que es una disciplina o ciencia como la llaman otros o algunos autores que se comprometo con el acceso libre de la información
*La
autora es estudiante de la Licenciatura en Educación mención Bibliotecología en
la UASD.
No hay comentarios:
Publicar un comentario